Conoce la relevancia de la vida y ministerio del apóstol Pedro

«El papa de la Iglesia católica no es la cabeza de la iglesia universal de Cristo». Esta fue la conclusión que le costó la vida al teólogo checo Juan Hus, uno de los precursores de la Reforma protestante (1369-1415 d. C.).
Los líderes católicos promovían la muerte de todo el que compartiera la opinión de Hus. De hecho, hasta el día de hoy enseñan la sucesión apostólica, la cual —según ellos— inició con el apóstol Pedro. Esta doctrina llevó a los católicos a venerar al papa como un sustituto o vicario de Cristo. Pero ¿las Escrituras respaldan este dogma romano asociado a la persona de Pedro?
Para responder de manera adecuada a esta, y muchísimas otras preguntas relacionadas con el apóstol Pedro, uno de los personajes más importantes en la historia del Nuevo Testamento, es de mucho valor contar con recursos que nos ayuden a tener la perspectiva histórica necesaria.



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Pedro el galileo
CÉSAR VIDALEn el libro Pedro el galileo: La vida y los tiempos del apóstol Pedro (B&H Español, 2023), César Vidal presenta un estudio profundo y sistemático de la vida de Pedro, el cual revela el impacto que tuvo en las siguientes generaciones de los seguidores de Jesús y desvela varios mitos relacionados con la figura de Pedro.
B&H ESPAÑOL. 384 PÁGINAS.

En el libro Pedro el galileo: La vida y los tiempos del apóstol Pedro (B&H Español, 2023), César Vidal presenta un estudio profundo y sistemático de la vida de Pedro, el cual revela el impacto que tuvo en las siguientes generaciones de los seguidores de Jesús y desvela varios mitos relacionados con la figura de Pedro.

El contenido del libro

Pedro el galileo es un libro de vocación histórica y está dividido en cuatro secciones principales que se enfocan en aspectos que marcaron la vida del apóstol.

La primera parte: El mundo de Pedro

Esta parte aborda los aspectos geográficos, políticos, económicos, sociales y religiosos del tiempo en que vivió el apóstol Pedro. Vidal reconoce la importancia de esta sección, pero aclara que el lector la puede saltar para pasar al relato central de la vida y ministerio de Pedro. No obstante, considero que conocer este tipo de información ayuda considerablemente al lector a adentrarse en el mundo de Pedro; por eso recomiendo que el lector la estudie.

La segunda parte: De discípulo de Juan a discípulo de Jesús

Vidal explica los detalles de cómo Pedro llegó a ser uno de los discípulos más cercanos a Jesús y presenta los argumentos a favor de que Pedro fuera discípulo de Juan el Bautista antes de convertirse en discípulo de Cristo. Esta sección de la vida del apóstol junto al Mesías se caracteriza por ser una de gran aprendizaje y de importantes experiencias.

La tercera parte: Las llaves del reino de los cielos

El autor analiza las implicaciones y el significado de la afirmación de que Pedro recibió las «llaves del reino» mientras caminaba con Jesús (Mt 16:19). En esta sección también se abordan las implicaciones del fruto del ministerio de Pedro, su participación en la controversia relacionada a los gentiles y la disputa en Antioquía (Gá 2:1 ss.).

La cuarta parte: Los años oscuros

Los últimos años de Pedro y lo que se puede asumir con seguridad según las fuentes históricas, junto al estudio de las dos cartas que llevan su nombre, corresponde a la cuarta y última parte del libro.

La importancia de la figura del apóstol Pedro

Más allá de reconocer la cercanía de Pedro con el Señor Jesús y su papel en la iglesia primitiva, tal parece que no muchos ven las luces de Pedro en su justa dimensión.

Vidal menciona que basta con revisar la bibliografía existente con respecto a Pedro y compararla con la que está orientada al apóstol Pablo para notar que, en comparación, existe poco interés en analizar el aporte de Pedro al cristianismo. No obstante, pienso que se debe a que la atención que se le da a Pablo es proporcional con el corpus literario que se le atribuye, en comparación con la producción literaria de Pedro.

La importancia del apóstol Pedro es visible en diferentes momentos del Nuevo Testamento. En primer lugar, en el desarrollo del ministerio de Jesús. Cómo apunta Vidal, Pedro es un testigo por excelencia de la obra de Cristo al estar presente prácticamente en cada narrativa de la vida del Maestro, sin importar que fuese ante una multitud, solo con los apóstoles o con un reducido grupo de los doce. Esto lo constituyó en una fuente de vital importancia para los escritores de los evangelios, ya que aparece como parte clave de varias enseñanzas de Cristo.

En segundo lugar, Pedro asumió el liderazgo de la iglesia luego de la ascensión de Jesús y tuvo a su cargo el primer sermón de la iglesia en Jerusalén. Además, lideró a la iglesia en el cumplimiento de su misión dada por Cristo (Hch 1:8). Pedro «abrió» el reino a los judíos por medio de una predicación centrada en Cristo.

En tercer lugar, Pedro llevó el evangelio a los gentiles y les «abrió» las puertas del reino. Por indicación de Dios, ignoró los prejuicios raciales de los judíos, llevó el mensaje a los que no eran pueblo y presenció cómo el Espíritu Santo descendió sobre  los gentiles en casa de Cornelio, un evento que dio un giro a la iglesia primitiva (Hch 10:1 – 11:18).

En cuarto lugar, el aporte de sus dos cartas. Son escritos con contenido doctrinal muy práctico, matizados por la cercanía de Pedro con el Maestro. A pesar de esta realidad, hay quienes han mostrado oposición a su segunda carta, alegando una diferencia de vocabulario. Pero, como señala Vidal respecto al estilo de redacción: «la realidad es que no hay un escrito más parecido a la segunda carta de Pedro que la primera de Pedro» (p. 273).

La importancia de interpretar bien el papel de Pedro

A través de los años, muchas personas han tergiversado el papel de Pedro en el ministerio de Jesús y de Su iglesia. Dentro de estos errores, ampliamente explicados y rebatidos por Vidal, está la creencia de que la roca sobre la que está fundada la Iglesia católica es Pedro.

De esta enseñanza deriva un sinnúmero de dogmas y prácticas que han servido de tropiezo, como el establecimiento de la figura del papa. Vidal muestra, con argumentos claros y profundos, los errores sobre el papado cuando se compara con la Escritura. Por ejemplo, el hecho de que la Iglesia católica llame al papa «vicario» o «representante de Cristo» en la tierra significa que le atribuyen características que solo Cristo tiene por Su naturaleza divina.

La supuesta infalibilidad papal, la sucesión papal, su autoridad ex cathedra y otros dogmas católico-romanos surgen de malinterpretar las palabras de Jesús: «Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré Mi iglesia» (Mt 16:18). Vidal aborda de una manera profunda su respuesta a este problema y concluye en lo siguiente: «Pedro, desde luego, jamás incurrió en esa blasfemia ni instó a nadie a hacerlo ya que siempre enseñó que la piedra sobre la que se levantaba la iglesia era Cristo» (p. 111; cp. 1 P 2:4).

Es importante mencionar que hay una gran cantidad de argumentos sólidos que el autor presenta para demostrar que no hay ninguna fuente histórica confiable que asocie a Pedro como fundador o líder de la iglesia en Roma. Todas estas son creencias tardías y distorsionadas sobre la vida del apóstol Pedro.

En conclusión, Pedro el galileo es un libro que profundiza y aclara muchos aspectos históricos importantes de la vida del apóstol y otros que han pasado desapercibidos en muchas generaciones.

Si eres tentado, sufres persecución, tu fe desfallece o si has fallado en tu fidelidad ante el Señor y necesitas restauración, recuerda que Pedro estuvo en situaciones como estas. Por eso esta lectura te retará y confortará, ya que la figura de Pedro señala a Cristo, de quien el apóstol dijo: «Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Y nosotros hemos creído y sabemos que Tú eres el Santo de Dios» (Jn 6:68-69).

Si te interesa conocer más de este recurso, puedes leer este fragmento: ¿Cuál fue el propósito del concilio de Jerusalén?

Argenis De Oleo M. Es el encargado de la logística y el mantenimiento de flota en una agroindustria. Sirve al Señor en la Primera Iglesia Bautista Dominicana y en el Seminario Bautista Internacional. Vive con su esposa Virginia en República Dominicana.

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