Hace poco el ministerio 9Marks publicó en inglés un artículo excelente en el que el pastor Greg Gilbert brinda algunos consejos para iglesias que transmiten sus servicios online.
Como alguien que busca pensar sobre cómo los cristianos podemos usar la tecnología con sabiduría, incluso en tiempos de pandemia, encontré que las palabras de Gilbert son muy oportunas.
Quisiera destacar estos tres consejos que él comparte, en especial a pastores:
1. No trates de convencer a todos de que transmitir el servicio online es genial.
“No es genial. Apesta… Así que sé honesto con tu iglesia al respecto. Menciona de vez en cuando cuánto anhelas volver a estar junto a la iglesia; menciona lo poco divertido que es estar separados; y, sobre todo, no intentes despertar entusiasmo diciéndole a la gente lo maravilloso que es sentarse en pijama y comer rollos de canela mientras vas a la iglesia.
Si no tienes cuidado, ¡pueden comenzar a estar de acuerdo contigo!”.
2. Intenta incluir muchos recordatorios sutiles de que una transmisión en vivo no es un sustituto de la reunión.
Por ejemplo, se recomienda dejar de usar frases como “qué bueno es estar reunidos aquí” y no hablar de la transmisión como una reunión.
3. No hagas la transmisión muy profesional.
“[En las transmisiones de nuestra iglesia] deliberadamente hemos decidido que todo se vea muy rudo, sin edición, sin gráficos, sin música excelente, sin ángulos de cámara, etc. ¿Por qué?
Porque no queremos que nadie confunda esto con la televisión. No queremos que nuestra gente se acostumbre a un ‘estupor de televisión’ demasiado familiar. Más bien, queremos que estén constantemente conscientes del hecho de que esto no es normal, no se supone que sea pulido, y no es tan bueno como estar presente juntos”.