“Más todas las cosas, cuando son puestas en evidencia por la luz, son hechas manifiestas; porque la luz es lo que manifiesta todo. Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo. Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. (Efesios 5:13-16)”
En la Biblia encontramos la historia de un hombre llamado Naamán, general del ejército del rey de Siria, pero lo que se destaca en esta historia es que este hombre padecía de una terrible enfermedad llamada lepra y tristemente esta enfermedad era causa de deshonra para el afectado y para su familia, ya que muchas personas de aquel tiempo pensaban que ese tipo de enfermedades eran por causa de su pecado y, por lo tanto, no podían socializar y eran desterrados de la población. Pero este hombre desesperado por la situación obedece a su criada, quien era una mujer judía consagrada a Dios. En obediencia Naamán se dirige a hablar con el profeta Eliseo y el profeta se enteró de la situación y lo envío a sumergirse siete veces en el río Jordán.
Quizás este hombre ya había perdido toda su esperanza en encontrar una solución para su problema, así como muchos de nosotros pensamos cuando estamos pasando por tiempos difíciles y no vemos una salida. Nuestro Dios en estos tiempos nos invita a entender todo lo está pasando y lo más probable es que nos preguntemos: ¿Es posible empezar de nuevo cuando las situaciones nos agobian?
Claro que es posible comenzar de nuevo, pues una vida de fe es una vida de entrega, de confianza y de esperanza en el único que puede darnos esta seguridad que es Cristo Jesús. Ciertamente, estos tiempos son difíciles; son tiempos de desigualdades sociales, de pandemias y de violencia desmedida, pero como hijos de Dios y como creyentes en nuestro Señor Jesús podemos ver estos tiempos de una forma optimista y provechosa, ya que tenemos que buscar y sumergirnos en este clamor con oración en todo tiempo y en todo momento sometiéndonos al control absoluto del Espíritu Santo, porque de esta forma vamos a contrarrestar a todos aquellos gigantes que se han levantado en todas las esferas de la sociedad. La luz de nuestro Señor Jesucristo sigue estando encendida en estos tiempos, porque Él está por encima de los acontecimientos que están sucediendo y Él espera que todos nosotros podamos someternos a Su cobertura para que podamos discernir y podamos comprender sobre estos tiempos y ver cómo Él nos trae respuesta sobre nuestras vidas.
Estos tiempos en los cuales estamos viviendo son malos, son difíciles, pero el peso de Su gloria sigue estando presente en todo momento y en todo lugar. Por lo tanto, mis queridos hermanos, nuestras necesidades están en las manos de nuestro Señor, ya que nuestro amado Jesús, vela día y noche por cada uno de nosotros y nuestras situaciones dependen solo del consumador de nuestra fe, pero es necesario que podamos someternos a ese control y saber que nuestro Dios sigue a nuestro lado.
El libro del profeta Isaías dice:
“Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh, Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador; a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti. (Isaías 43:1-3)”
Nuestro amado Dios a través de esta Palabra nos dice claramente que está de nuestro lado, para guiarnos y para sacarnos adelante, no importando cuáles sean los tiempos que estamos viviendo, por lo tanto, aprovechemos estos tiempos que nuestro Dios nos da, porque Él quiere seguir revelándose a cada uno de nosotros y a través nuestro, entregar un mensaje esperanzador a esta humanidad que vive con un futuro incierto y alejados de Su Creador. Nuestro Dios está por encima de los tiempos y de las necesidades de cada uno de nosotros.
Sólo debemos buscarle con un corazón sincero y Él nos dará la salida en todo momento, así que sigamos confiando en nuestro amado Dios, porque Él está por encima de cualquier aflicción que nos quiera destruir.
𝑸𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝑫𝒊𝒐𝒔 𝒂𝒏̃𝒂𝒅𝒂 𝒃𝒆𝒏𝒅𝒊𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒂́ 𝒓𝒆𝒇𝒍𝒆𝒙𝒊𝒐́n
Que Dios te cuide y bendiga rica y abundantemente, junto a tus seres queridos y anuncia al mundo que nuestro Señor Jesucristo vive y espera con sus manos amorosas por el que quiera conocerle.
Franklin Mirabal, es miembro líder de la Iglesia Asamblea de Dios Central de la ciudad de Higuey, República Dominicana
