¿Existe una única justificación adecuada para la santidad centrada en el evangelio?
¿Deberíamos, al hablar de la santificación, evitar las amenazas y advertencias y el juicio venidero y centrarnos simplemente en el hecho de ser aceptados en Cristo? ¿Cuántas motivaciones tiene la Biblia para la piedad?
Solo en los tres capítulos de la Segunda Epístola de Pedro, veo al menos veinte.
1. Buscamos la santidad para llegar a ser partícipes de la naturaleza divina (2 P 1:4).
2. Hacemos todos los esfuerzos posibles para crecer en piedad porque Dios ya nos ha liberado de la corrupción que hay en el mundo por causa de los malos deseos (2 P 1:4).
3. Crecemos en gracia para no ser ociosos ni estériles en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo (2 P 1:8).
4. Buscamos un carácter semejante al de Cristo para no ser ciegos, habiendo olvidado que fuimos limpiados de nuestros pecados anteriores (2 P 1:9).
Crecemos en gracia para no ser ociosos ni estériles en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo
5. Nos esforzamos por alcanzar la santidad para que nuestro llamado y elección sean seguros y no caigamos (2 P 1:10).
6. Practicamos estas cualidades piadosas para que se nos proporcione ricamente una entrada en el reino eterno (2 P 1:11).
7. Procuramos la piedad porque Jesús volverá otra vez con gran poder; sabemos que esto es cierto por la gloria revelada en el monte de la transfiguración y por la profecía de las Escrituras (2 P 1:16-21).
8. Caminamos en obediencia a Cristo porque los que se dejan llevar por la sensualidad están condenados y serán destruidos (2 P 2:3).
9. Nos tomamos en serio la santidad porque creemos que Dios sabe cómo juzgar a los malvados y salvar a los justos (2 P 2:4-10).
10. Nos apartamos de la impiedad porque los que se deleitan en el pecado son manchas e inmundicias, animales irracionales, almas inestables e hijos de maldición (2 P 2:10-16).
11. Buscamos la santidad porque el pecado nunca cumple sus promesas (2 P 2:17).
12. Buscamos la santidad porque los que vuelven a vivir en su pecado son como los que vuelven a la esclavitud, vuelven al fango y vuelven al vómito (2 P 2:19-21).
13. Debemos recordar ser santos porque en los últimos días vendrán burladores siguiendo sus propios deseos pecaminosos (2 P 3:3).
Buscamos la piedad para que Cristo sea glorificado ahora y hasta el día de la eternidad
14. Hacemos todo esfuerzo posible por ser piadosos porque el mundo no continuará siempre como ahora; los cielos y la tierra están reservados para el fuego, guardados para el día del juicio y de la destrucción de los impíos (2 P 3:4-7).
15. Debemos tomarnos en serio la semejanza a Cristo ahora mismo porque no sabemos cuándo regresará el Señor (2 P 3:10).
16. Buscamos la santidad porque todas nuestras obras serán expuestas en el día final (2 P 3:10).
17. Buscamos la santidad porque todo aquello para lo que vivimos en esta vida será quemado y disuelto (2 P 3:11).
18. Nos esforzamos por caminar en obediencia y arrepentimiento porque al hacerlo podemos apresurar la venida del día de Dios (2 P 3:12).
19. Vivimos en rectitud ahora porque estamos esperando cielos nuevos y tierra nueva en los que la justicia morará para siempre (2 P 3:13).
20. Buscamos la piedad para que Cristo sea glorificado ahora y hasta el día de la eternidad (2 P 3:18).
Publicado originalmente en The Gospel Coalition. Traducido por Eduardo Fergusson.
Kevin DeYoung (MDiv, Seminario Teológico Gordon-Conwell) es pastor principal de la Iglesia Christ Covenant en Matthews, Carolina del Norte, presidente de la junta de The Gospel Coalition, profesor asistente de teología sistemática en el Seminario Teológico Reformado (Charlotte) y candidato a doctorado en la Universidad de Leicester. Es autor de numerosos libros, incluyendo Just Do Something. Kevin y su esposa, Trisha, tienen siete hijos.
