BibliasTeología

Por qué necesitamos las malas noticias de la historia israelita

«Son terribles», se lamentaba una estudiante.

Otros se inquietaban y algunos miraban hacia abajo mientras su compañera compartía sus impresiones sobre el comportamiento de los israelitas en los relatos del Antiguo Testamento que yo había asignado a la clase. Continuó quejándose de desmembramientos, estilos de vida desagradables y brutales agresiones sexuales. Mi clase obligó a muchos alumnos a enfrentarse por primera vez a estas vergonzosas realidades de la historia de Israel. Estaba claro que la clase entera necesitaba procesarlas juntos.

La historia del Israel bíblico está plagada de malas noticias. Hasta que llegan a mi clase, muchos de mis alumnos cristianos evangélicos nunca han leído ni escuchado hablar de estas duras historias de las Escrituras. Pero tenemos que asumirlas. Parte de lo que hace que las buenas noticias de Jesús el Mesías sean buenas noticias son las malas noticias que encontramos en la narrativa del Antiguo Testamento.

Muchos cristianos modernos empiezan con la creación y la caída y luego saltan directamente al Calvario. El modelo creación-caída-salvación no tiene nada de malo, salvo que la costumbre de saltarse la parte intermedia —la turbia historia de Israel— puede llevarnos a considerarla insignificante.

La Biblia no se mueve directamente de las promesas de la historia de la Torá a los cuatro evangelios. Ambas partes están conectadas por la historia de Israel. Los grandes actos misericordiosos de Yahvé llenan las páginas de esta rica historia.

Las malas noticias de la historia redentora culminan con la enseñanza, muerte y resurrección del Mesías

 

Sin embargo, ningún autor bíblico evita el pecado humano. Leemos sobre la rebelión desde la tierra prometida hasta Mesopotamia (Babilonia) y de vuelta a la tierra. Tenemos que escuchar con atención porque las malas noticias de la historia redentora culminan con la enseñanza, muerte y resurrección del Mesías. Tres ejemplos dejan esto claro.

Cuando Jonatán era joven

La disposición no cronológica del libro de los Jueces prepara un final impactante. Después de que las cosas empeoraran de un libertador a otro, el libro termina con un par de narraciones horribles demasiado depravadas para ser descritas con la repetida caracterización de que «los israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR» (Jue 2:113:7124:16:110:613:1). En cambio, el narrador dice: «Cada uno hacía lo que le parecía bien ante sus propios ojos» (17:6; 21:25).

Pero ¿cuándo las cosas se pusieron tan mal? Al concluir la debacle de la falsa adoración danita, y en medio de la guerra civil desatada por el crimen de los benjamitas contra la concubina del levita, el narrador revela que estas cosas sucedieron en los días de los nietos de Moisés y Aarón (18:30; 20:28). Para resaltar el punto, el narrador dice cinco veces que Jonatán, el nieto de Moisés, era todavía «joven» (17:7, 11, 12; 18:3, 15).

Cualquiera que recuerde con nostalgia los días en que Israel entró por primera vez en la tierra prometida debería releer el final de Jueces. No hay tal cosa como los viejos tiempos buenos, al menos no en las tierras altas de Benjamín y Efraín. El nieto de Moisés aún es joven en los días en que «cada uno hacía lo que bien le parecía».

Cuando Manahem pecó

Si se le preguntara a Manahem, el gobernante del reino del norte de Israel, podría explicar que los líderes políticos a veces tienen que tomar decisiones difíciles por el bien común. Con esto, Manahem se referiría a su decisión de poner a Israel bajo vasallaje ante el Imperio asirio.

¿Cómo pagó Manahem el excesivo tributo a Asiria? Con plata de otras personas, por supuesto. El libro de los Reyes explica que Manahem tomó esta decisión para fortalecer su propio reinado (2 R 15:19-20). Por si esto no fuera suficientemente malo, el autor incluye un espantoso crimen de guerra de Manahem para mostrar su carácter malvado.

El texto bíblico recuerda a Manahem por abrir el vientre a las mujeres embarazadas de Tifsa como represalia porque no se rindieron inmediatamente (v. 16). Los antiguos asirios de la época de Manahem no se avergonzaban de las brutalidades que infligían a sus enemigos. Las inscripciones de los reyes y los muros de los palacios asirios están llenos de atrocidades espantosas. Sin embargo, los asirios no solían celebrar actos despreciables como el de Manahem. Solo una antigua inscripción asiria y un único relieve visual conmemoran este comportamiento.

Estos casos aislados contrastan fuertemente con la larga serie de reyes asirios que hicieron que sus escribas y escultores conmemoraran repetidamente el desmembramiento, desollamiento en vida y tortura de aquellos a los que derrotaron. Las viles acciones de Manahem lo distinguieron de los peores reyes asirios.

Cuando Nehemías atacó a los rebeldes

Nehemías hace lo que muchos líderes solamente sueñan en secreto. Arranca físicamente las barbas y golpea a los hombres rebeldes de Jerusalén que habían contraído matrimonios apóstatas (Neh 13:25). Nehemías sabe lo que está en juego.

Doce años antes, los que habían regresado del exilio habían prometido solemnemente obedecer la voluntad de Dios. Los judíos habían puesto su promesa por escrito y la habían firmado (Neh 10), pero ahora ya no recordaban su juramento. En el segundo mandato de Nehemías como gobernador, utiliza la promesa del pueblo como lista de control para exponer sus pecados (13:4-31). Se rebelaron contra todo lo que habían prometido, así que los pecadores volvieron a llenar las calles de Jerusalén. Es como si el exilio nunca hubiera ocurrido.

La misericordia y el amor del Señor aparecen por todas partes en el Antiguo Testamento. Pero las malas noticias de rebeliones pecaminosas también llenan las páginas de la historia de Israel. En las narraciones que nos llevan desde el jardín hasta el exilio babilónico, nos sentimos tentados a preguntarnos qué podría ser peor. La respuesta es lo que ocurrió en el Gólgota.

Todos necesitamos primero las malas noticias

Pastores, conferencistas y blogueros llevan mucho tiempo lamentando el analfabetismo bíblico de los cristianos de hoy. Pero no se trata simplemente de un inconveniente. No se trata solo de que tengamos que ofrecer una explicación para remediar los relatos bíblicos que las generaciones anteriores conocían bien. No, cuando las generaciones más jóvenes se saltan la historia de Israel, se empobrece el evangelio. Necesitamos estos relatos para reforzar nuestra visión de las buenas nuevas al menos de dos maneras.

Cuando leemos sobre rebelión en las Escrituras, aprendemos a reconocerla en nosotros mismos

 

La primera es que, cuando leemos sobre rebelión en las Escrituras, aprendemos a reconocerla en nosotros mismos. El Antiguo Testamento no se limita a ofrecernos imágenes del pecado de otros; sus relatos históricos son espejos que nos muestran nuestro pecado (1 Co 10:611Stg 1:23-25).

La segunda es que la lectura de esta larga historia de rebelión nos muestra hasta dónde llega el Señor en la búsqueda de Su pueblo. Una y otra vez, el Señor obró con gracia redentora. Jesús infiere que el Antiguo Testamento da testimonio suficiente de los propósitos redentores de Dios, suficiente para dejarnos sin excusa si rechazamos la resurrección de Cristo de entre los muertos (Lc 16:31).

Por esta razón, los estudiantes de mis clases necesitan estudiar la historia del Antiguo Testamento, aunque la pecaminosidad de Israel los deje boquiabiertos. Solo quienes comprenden la profundidad del pecado humano pueden ver la necesidad de arrepentimiento y la amplitud de la gracia. El Señor, en Su sabiduría, se ha complacido en presentar al antiguo Israel en todo su estado de ruina.

Necesitamos las malas noticias para recuperar la bondad de las buenas noticias. Necesitamos la historia de Israel que culmina en la enseñanza, muerte y resurrección de nuestro Señor.


Publicado originalmente en The Gospel CoalitionTraducido por Eduardo Fergusson.

Gary Edward Schnittjer (PhD, Seminario Teológico de Dallas) es profesor distinguido de Antiguo Testamento en la Facultad de Divinidad de la Universidad de Cairn en Langhorne, Pensilvania, y autor de Old Testament Use of Old Testament [Uso del Antiguo Testamento en el Antiguo Testamento] (Zondervan Academic, 2021).

Acerca del Autor

0.00 avg. rating (0% score) - 0 votes
Mostrar Más

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Back to top button
18405