Devuelve tus pasos a la casa de DIOS

“Vuelve, oh, Israel, a Jehová tu Dios; porque por tu pecado has caído. (Oseas 14:1)”

Que alegría se siente en una familia cuando un miembro de esta regresa después de un largo tiempo al núcleo del hogar, sin lugar a duda, que se producirán muchos sentimientos encontrados, de gozo y emoción en el corazón de aquellos que le aman.

Todo padre siente un gozo indescriptible, cuando sus hijos regresan a casa después de un largo periodo de tiempo, ya que el corazón de un padre está siempre pendiente del hijo que no está presente en el hogar, y mucho más, se preocupa cuando sabe que su hijo no anda en buenos pasos.

En el texto que hemos leído en esta ocasión, nuestro Dios nos dice a cada uno de nosotros que nos volvamos a Él, que si traemos esta Palabra a nuestra realidad actual podemos decir que lo que desea nuestro Dios es que;

🔹️¡¡NOS VOLVAMOS A ÉL DE TODO CORAZÓN!!
🔸️¡¡QUE NOS VOLVAMOS A NUESTRAS IGLESIAS!!
🔹️¡¡QUE NOS VOLVAMOS AL SERVICIO O AL MINISTERIO QUE HEMOS ABANDONADO!!
🔸️¡¡QUE NOS VOLVAMOS A NUESTRO ESTILO DE VIDA COMO HIJOS DE DIOS!!

Estas acciones nos hacen reflexionar, que, al alejarnos de los caminos de Dios, nuestra mala determinación nos llevará a una vida de pecados, que sin duda nos hará caer.

PERO; ¿EN QUE COSAS NOS HARÁ CAER?

🔹️En Adulterio
🔸️En el Desanimo
🔹️En el Materialismo
🔸️En la Comodidad
🔹️En la pereza
🔸️En el Enfriamiento Espiritual
🔹️ ¿En los Vicios?
🔸️ ¿Otros???

Es por esa razón que es tan necesario atender el llamado que nos hace Dios a nuestras vidas, es necesario que como Sus hijos recapacitemos y nos volvamos a la casa de nuestro Padre Celestial y no sigamos viviendo la vida que estábamos llevando lejos de Él.

La Palabra de Dios en este sentido nos enseña cómo podemos volver a la casa de nuestro Padre Celestial y para tal efecto podemos ver como nuestro Señor Jesucristo nos enseña a través de la Parábola del Hijo Prodigo, las bendiciones que trae a nuestras vidas, el volver a los caminos que nuestro Dios ha establecido para cada uno de nosotros.

Cuando leemos esta hermosa parábola las enseñanzas que nuestro Señor Jesús ha preparado para nuestras vidas, es emocionante. (Lea Lucas 15:11-24)

1.-) PARA VOLVER A DIOS ES NECESARIO RECONOCER NUESTRA CONDICIÓN

En esta porción que acabamos de leer podemos ver que este hijo rebelde volviendo en si después de haber pasado por innumerables pruebas que son de la vida misma, reacciona y reconoce que había tocado fondo, solo en esa condición pudo quitarse la venda de sus ojos y se dio cuenta de la realidad que estaba enfrentando por su tozudes (Obstinado, testarudo) y por haber tomado su vida en forma irresponsable.

Esta enseñanza va para todos nosotros también, ya que mientras no queramos aceptar el estado real de nuestras vidas sin nuestro Dios como nuestro foco central, no podremos tomar la decisión de volver a Sus caminos.

Pensemos primeramente de donde hemos caído y reconozcamos lo que hemos perdido en todo este tiempo que nos hemos apartado de nuestro Dios y démonos cuenta la paz que teníamos, el gozo que había en nuestras vidas, la prosperidad que disfrutábamos, la unidad que había en nuestros hogares cuando caminábamos junto a nuestro Dios.

Debemos comprender que nuestro Dios no nos ha tomado por hijos, para que vivamos una vida de fracaso y de miseria, que lamentablemente muchos están viviendo en estos días por no tener la suficiente humildad de volver a Sus caminos y de tomar la decisión correcta de someternos a Su soberanía y a Su perfecta voluntad.

Todo hijo de Dios tiene que anhelar estar en la casa de Su Padre Celestial y así lo dice Su Palabra; (ver Salmos 84:1-4)

2.-) PARA VOLVER A DIOS ES NECESARIO TOMAR UNA DECISIÓN VALIENTE

El verso 18 y 19 es solamente un plan, pero el verso 20 es una acción.
Cuantos cristianos en la actualidad se han quedado solo con el deseo de volver a su hogar Celestial, de volver a sus ministerios, de volver a sus iglesias y en ese afán de querer volver tenemos todas las buenas intenciones, pero lamentablemente tenemos un tremendo obstáculo:

¡¡ NUESTRO ORGULLO!!

Las decisiones que no se transforman en acciones no sirven de nada, en Cristo, ya que no se trata solo de anhelar hacer algo, se trata de hacerlo.
Por lo tanto, si por alguna razón sientes que te has apartado de Dios toma en estos momentos una buena decisión y;

¡¡VUÉLVETE A TU CREADOR!!

3.-) NUESTRO DIOS SE GOZA DE TODO HIJO QUE VUELVE A ÉL   

Dice esta parábola, que cuando el Padre vio a su hijo volver fue movido a misericordia y aunque este hijo merecía un castigo por su mal estilo de vida y por su rebeldía, fue recibido con los brazos amorosos de su padre.

¡¡ASI ES NUESTRO DIOS!!

“Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos. (Oseas 14:4)”

Nuestro Dios nos recibe no porque seamos buenos, sino porque nos ama y tiene misericordia de cada uno de nosotros, no porque lo merecemos, sino porque somos Sus hijos amados.
Por lo tanto, si alguno se siente en esta condición, recapacite y vuélvase al servicio que prestaba en su iglesia, que no le importe las críticas de los demás, que no le importe el qué dirán, aunque algunos:

¡¡¡TE PONGAN CARAS Y TE RECHACEN!!!

Solo hay un rostro que nos debe importar y ese rostro es el de nuestro Padre Celestial. Por lo tanto, reflexionemos en nuestras propias familias, en nuestros propios hermanos, en nuestra la fe, en nuestros conocidos y preguntémonos;

¿Tenemos esa misma actitud que tiene Dios con nosotros, con nuestros semejantes?

Nuestros hijos por lo general; ¿Encuentran en la casa de sus padres, amor y comprensión o encuentran rechazo y humillación?

¿Es acaso nuestro hogar un lugar donde nuestras familias encuentran misericordia y gracia o es un hogar donde no hay perdón ni misericordia?

Si vivimos en soledad no es por culpa ni de Dios, ni de nuestras familias, sino por que en ocasiones tenemos nuestros corazones llenos de odio y rencor.

4.-) NUESTRO DIOS TIENE BENDICIONES DE BIEN PARA LOS QUE VIENEN A ÉL

“Porque le has salido al encuentro con bendiciones de bien; Corona de oro fino has puesto sobre su cabeza. (Salmo 21:3)”

Y más adelante en el evangelio de Lucas y en este mismo sentido, la Escritura nos dice de aquel hijo que se había apartado.

“Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. (Lucas 15:22)”

¡¡LE PUSO EL MEJOR VESTIDO!!

“En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas. (Isaías 61:10)”

Nuestro Padre Celestial nos dice en este precioso día, que Él creo para a cada uno de nosotros:

¡¡¡HIJO VUELVETE HOY A LA CASA DE TU PADRE CELESTIAL!!!

QUE DIOS TE CUIDE Y BENDIGA RICA Y ABUNDANTEMENTE junto a tus seres queridos y anúnciale al mundo que nuestro Señor Jesucristo vive y espera con Sus manos amorosas por el que quiera conocerle. AMEN.

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